María Cantalapiedra
Más que una marca, María Cantalapiedra es una herencia, un símbolo de pasión por la joyería que se ha transmitido de generación en generación.
Cuatro décadas de historia la respaldan, un legado familiar que comenzó con la visión y el talento de la propia María Cantalapiedra.
Hoy en día, sus hijas continúan con el legado, honrando la tradición e infundiendo un toque de frescura y modernidad a la marca.
Cada pieza de joyería es una obra de arte única, elaborada con mimo y atención al detalle, reflejando la pasión y el amor por el oficio que caracteriza a la familia Cantalapiedra.